“La desaparición de los niños y niñas de las calles afecta mucho a la ciudad; la ciudad sin niños y niñas es peor” (Francesco Tonucci)
- Somos ciudadanos y ciudadanas desde que nacemos -
Introducción
A través de esta iniciativa el objetivo es escuchar y dar protagonismo a los niños y niñas de entre 8 y 12 años que viven en Tolosa. Para ello, queremos hacer nuestro el proyecto de la ciudad de los niños y niñas, y ofrecer a nuestros hijos e hijas la posibilidad de manifestar sus inquietudes. Es decir, saber cómo perciben la ciudad desde su propia visión de vida. Partiendo de sus vivencias cotidianas y teniendo en cuenta que también usan el espacio público, tienen mucho que decir y aportar y pensamos que una villa adaptada a su medida puede ser beneficiosa para todos y todas.
Para lograr este objetivo, tomamos como base el proyecto internacional “La ciudad de los niños” o también llamada “Ciudad educativa”, basada en la experiencia del famoso pedagogo Francesco Tonucci, impulsor del proyecto “La Cittá de i Bambini”. El eje principal del proyecto es la participación activa de los niños y niñas para la creación de espacios públicos educativos, inclusivos y flexibles.
Un joven miembro del consejo infantil de Roma le dijo al alcalde de la ciudad: “Quisiera pedirle permiso a la ciudad, para poder salir de casa”. Se trata, sin duda, de una petición que da pie a la reflexión. El niño consideraba que la forma de ordenación del espacio era perjudicial para los más pequeños y pequeñas. Francesco Tonucci puso en marcha el proyecto “La ciudad de los niños” en Fano (Italia), su ciudad natal, y desde entonces infinidad de localidades han adoptado su proyecto. También muchos pueblos de Euskal Herria. El objetivo es recabar, difundir y coordinar experiencias, para poder crear una red de ciudades de los niños y niñas. Al fin y al cabo, según Tonucci, “la ciudad se ha convertido en un lugar hostil para quien no cumpla el perfil de hombre adulto y trabajador”.
En este proyecto, los niños y niñas se convierten en protagonistas de la ciudad, recorren físicamente la ciudad y manifiestan sus vivencias. La marca del proyecto es la seguridad, puesto que la falta de seguridad es uno de los problemas principales de las ciudades de hoy en día. Según se van reduciendo los riesgos desde la administración, el miedo aumenta: policía, cámaras, pasos “seguros” para peatones... Los niños y niñas, en cambio, reclaman una mayor presencia en el espacio público, y cuando ocupan las calles, automáticamente se crea una especie de ambiente de solidaridad, y las calles se vuelven más seguras.
En lo que se refiere a Tolosa, el embrión del proyecto fue la iniciativa “Mugi Hadi”, puesta en marcha hace catorce años. El programa, aunque se prolongó durante dos o tres cursos, se quedó en un ensayo realizado en un momento puntual. Cuando surgió el proyecto Agenda 21 Escolar, la iniciativa anterior se diluyó en esta nueva y los temas medioambientales tomaron especial relevancia con la implicación de toda la comunidad educativa. En esta ocasión, consideramos que, conociendo los puntos fuertes de ambos proyectos, se pueden aprovechar las sinergias existentes entre ellas. La Agenda 21 Escolar tiene como ejes principales la educación y el medio ambiente, y en “La Ciudad de los Niños y Niñas”, en cambio, prima más el ocio y el diseño de ciudad. Ambas tienen, sin embargo, un denominador común, la participación, y en muchas materias (movilidad, utilización de parques, etc.) se pueden tender puentes de intercambio.
Objetivos
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Dentro del sistema participativo que estamos creando en Tolosa, constituir un subsistema que garantice la participación de los niños y niñas desde el primer momento, para que puedan expresar su opinión y hacer sus aportaciones en todos los temas que les afecten. Es decir, tomando la transversalidad como objetivo, tal y como se hace en materia de medio ambiente y género, constituir un sistema de participación que tenga en cuenta a los niños y niñas así como sus preferencias y necesidades.
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Promover el proceso participativo de los niños y niñas de Tolosa, convirtiendo sus vivencias en escala de valor para la utilización de los espacios públicos.
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Hacer que se sientan ciudadanos y ciudadanas. Hacerles sentir sujetos activos, participes de una comunidad, y demostrarles que su opinión cuenta y es importante. Queremos formar a la ciudadanía del futuro: crítica, libre, participativa y con inquietudes.
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Hacer que el Ayuntamiento vea la distribución del espacio público de Tolosa desde el prisma de los niños y niñas, y tome en cuenta esa visión en las futuras líneas de trabajo.
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Trabajar la ciudadanía desde la juventud y no tanto la ciudadanía del futuro, escuchando y respetando la opinión de los demás, construyendo la diversidad.
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A medio plazo, dar los pasos necesarios para ayudar y materializar las actuaciones propuestas por el Consejo a través de un presupuesto concreto.
Metodología
Para poder llevar a cabo este proyecto es fundamental ir de la mano de las asociaciones y grupos de tiempo libre de Tolosa, ya que su ayuda es imprescindible. Además, se deberían tener en cuenta otras muchas iniciativas que promueven el ocio de los niños y niñas, entre otras, las organizadas por los clubs deportivos, las actividades extraescolares, los coros infantiles, los grupos de baile, la escuela de música, los educadores y educadoras de calle… Todos los niños y niñas que estén involucradas en estos grupos y asociaciones tendrán la oportunidad de participar en el Consejo de la Infancia (Proponemos el nombre de “Mugi-hadi”, reivindicando y reclamando la participación de los niños y niñas en este foro). La primera convocatoria para formar el Consejo se haría con los y las representantes de los citados grupos, en la que se deberán adoptar, entre otras, las siguientes decisiones:
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La periodicidad, el lugar y el horario más apropiado de las reuniones.
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El programa de trabajo para el primer año. Para ello, se les propondrá una serie de temas posibles a tratar, con los que se conformará la planificación de todo el curso. En lugar de un enfoque anual, deberemos tomar como criterio temporal el curso escolar, ya que marca por completo su ritmo de vida.
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Los medios a utilizar en el tratamiento y estudio de los temas.
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El procedimiento para transmitir al Ayuntamiento el trabajo realizado en el Consejo.
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Formas de hacer público y mostrar el trabajo realizado en el Consejo, tanto al resto de niños y niñas como a la ciudadanía.
Se contempla que el Consejo lo formen niños y niñas de entre 8 y 12 años. Teniendo en cuenta otras iniciativas análogas del entorno, contemplamos un número máximo de 30 personas, que se convertirán en representantes y portavoces del resto de niños y niñas del municipio. Por lo tanto, es preciso hacer un trabajo previo entre los y las agentes municipales, trabajo para el cual el Ayuntamiento debe disponer los medios precisos. Estos son los recursos municipales implicados en la formación de este grupo de trabajo:
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TIZ, Centro Medioambiental de Tolosa y Departamento de Medio Ambiente.
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Departamento de Juventud.
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Educadores y educadoras de calle.
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Departamento de Urbanismo.
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Alcaldía.
Una vez constituido el Consejo de la Infancia, prevemos que se reúna 4 veces al año, y al final del curso realizar una reunión con los y las representantes municipales, en la que se transmitirán las conclusiones de todo el curso. Todas estas decisiones las debería adoptar el propio Consejo que, dependiendo de los asuntos a tratar, puede tener un planteamiento flexible y variable.
Temas
El proyecto ofrece la posibilidad de tratar temas muy diversos. En principio, la propuesta es abordar el tema del espacio público:
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Dónde juegan.
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Con quién juegan.
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Quién les lleva a los parques y lugares de juego.
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Cuáles son sus límites.
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A qué edad empiezan a andar solos, cuando adquieren esa autonomía.
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Qué suponen para ellos las carreteras, los coches y los aparcamientos.
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Cómo mejorarían Tolosa.
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Qué es lo que cambiarían, qué es lo que les gusta.
Por lo tanto, queremos ofrecerles la posibilidad de hablar sobre Tolosa, manifestar sus vivencias a través de las actividades lúdicas que realicen, partiendo de la siguiente reflexión de fondo: ¿Qué es para ti ser tolosarra? ¿Qué significa Tolosa para ti y cómo mejorarías tu localidad? El objetivo es fomentar su participación mediante recursos lúdicos, emprender el camino hacia la ciudadanía, hacer que se sientan protagonistas, demostrarles que sus opiniones son importantes y, yendo más allá, que por su mediación los padres y madres y otros colectivos poco a poco vayan conociendo esta dinámica. Al fin y al cabo, los niños y niñas tienen la oportunidad de convertirse en agentes activos y activas de la villa.
Funcionamiento
Este proyecto ha nacido con vocación permanente. Es decir, no se contempla como una actuación puntual, sino como una iniciativa que se vaya afianzando con el tiempo. De esta manera, los y las miembros del Consejo se reunirán aproximadamente 4 veces al año con los y las representantes municipales para exponer el trabajo realizado previamente en los grupos y llegar a consensos, siempre a través de dinámicas adecuadas a los niños y niñas.
1.- Trabajo previo:
Para poder llevar a cabo el proyecto, proponemos 6 reuniones de trabajo entre los y las agentes municipales, para concretar y ultimar todos los aspectos. El planteamiento es realizar estas reuniones de marzo a enero, en base a la siguiente hoja de ruta:
- Concretar la forma realizar la convocatoria para la formación del Consejo de la Infancia.
- Propuesta de funcionamiento del Consejo.
- Temas a tratar, lista de materias que se abordarán en el Consejo.
- Cuándo y de qué forma se activará el contacto con los y las representantes municipales.
- Forma de promover por parte del Consejo el “feedback” necesario con el resto de niños uy niñas...
2.- Proceso de constitución del Consejo:
Para poner en marcha el Consejo se debería acudir a todos los grupos, asociaciones, espacios y actividades que guarden relación con el ocio. Una reunión general con responsables de cada grupo servirá para exponer el proyecto.
En una segunda reunión se creará la dinámica para constituir el consejo con niños y niñas de cada agrupación para formar el grupo final.
Finalmente, en una tercera cita, se hará la primera reunión con los niños y niñas que formen el Consejo definitivo, para definir las líneas principales del proyecto.
En todas estas dinámicas hay que tener muy presente el enfoque lúdico, para impulsar de modo divertido la participación de los niños y niñas. El inicio del próximo curso puede ser el momento apropiado para que el Consejo emprenda su trabajo de modo activo, y para ello, se deberán concretar las formas de dinamización y los dinamizadores y dinamizadoras. Además de la constitución del Consejo, se deberán definir también sus funciones y los aspectos formales de este foro. Estas son las características contempladas: niños de entre 8 y 12 años; renovación anual de un número concreto de miembros del Consejo; garantía de paridad de niños y niñas; integración; el euskara será la lengua vehicular; se impulsaran dinámicas que promuevan la opinión de todos y todas las participantes; y se trabajará la importancia de ser representante.
3.- El trabajo del Consejo:
En las reuniones se pueden abordar los problemas, aportaciones, reivindicaciones, etc. propuestas por los niños y niñas, así como cualquier problema o proyecto que sea de actualidad en Tolosa. Para el tratamiento de los temas, los dinamizadores y dinamizadoras deberán conjugar ocio y participación; es decir, el análisis del tema abordado se deberá llevar a cabo de manera casi inadvertida para los niños y niñas. Las materias a tratar podrán surgir del mismo foro, o los podrá proponer el Ayuntamiento por ser de actualidad. Podrá establecerse un nexo con la A21E, cuando la canalización de ciertos temas sea más fácil a través de los colegios y viceversa. Por ejemplo, para al próximo curso, a la hora de diseñar el programa de la Agenda 21 Escolar, se estudiará la propuesta de trabajar el proyecto “Haurren Hiria”, con el objetivo de crear sinergias entre ambas. De esta forma, se deberían promover y tender puentes entre ambas iniciativas, para lo cual el Centro Medioambiental de Tolosa (TIZ) puede ser un intermediario y garante perfecto.