Declaración institucional con motivo del día mundial para prevenir el abuso sexual infantil

Ayuntamiento de Tolosa
24/11/2021 | Cultura, Juventud, Fiestas
  • El Ayuntamiento de Tolosa seguirá colaborando y coordinándose con la Diputacion Foral, Gobierno Vasco y el resto de instituciones competentes en la materia, además de con asociaciones dedicadas a la prevención del abuso sexual y el maltrato infantil, a fin de desarrollar las iniciativas y garantizar los recursos necesarios que permitan prevenir, detectar y brindar una atención adecuada y de calidad que asegure el acceso a los niños, niñas y adolescentes a sus derechos, poniendo en marcha todos los protocolos y las medidas de atención y protección efectivas.

 

Con motivo de la celebración del Día Mundial para la Prevención del Abuso Sexual Infantil (19 de noviembre), todos los grupos políticos con representación en el Ayuntamiento de Tolosa han acordado la siguiente declaración institucional:

Teniendo en cuenta que los Gobiernos y las organizaciones de la sociedad civil deben jugar un papel importante en la promoción y el respeto de los derechos infantiles y juveniles, tal y como son enunciados, específicamente en la Convención sobre los Derechos del Niño (artículos 19 y 34) y con el fin de contribuir a la protección infantil contra los abusos, la WWSF lanzó en el año 2000 El Día Mundial para la Prevención del Abuso contra los niños, niñas y adolescentes, destinado a ser conmemorado cada 19 de noviembre en sinergia con el Día de los Derechos del Niño (20 de noviembre), que tiene por objetivo poner en evidencia el problema de los abusos, así como la necesidad de intervenir urgentemente en la difusión de programas de prevención de la violencia sexual.

Se trata de un fenómeno complejo, especialmente desconocido en su dimensión real porque la información disponible es realmente muy escasa, pero que afecta a todas las sociedades en las que se ha estudiado y cuya prevalencia se estima podría ser muy superior de la que normalmente aparece reflejada en las estadísticas elaboradas a partir de los hechos conocidos. De acuerdo con el Comité de los Derechos del Niño, el abuso sexual infantil constituye una forma de maltrato grave a niños, niñas y adolescentes que implica una transgresión de los límites íntimos y personales. Tiene profundas y duraderas consecuencias en el desarrollo de la persona que lo padece y afectan a su dignidad, haciendo de las víctimas personas más vulnerables ante desequilibrios mentales y nuevas victimizaciones, entre otros efectos. Las niñas y los niños que han sido víctimas de abuso sexual suelen expresar rechazo hacia el progenitor o la progenitora (madres y/o padres), tener problemas de enuresis y, a medida que se hacen mayores, presentar un comportamiento sexual inapropiado para su edad y conductas antisociales en la escuela y en la sociedad en general. A menudo suele ser una violencia sostenida en el tiempo y gradual (que no se reduce a una acción ocasional y que va aumentando de intensidad paulatinamente), que tiene como foco principal la propia familia o círculos próximos de relaciones (amistades, familia extensa…) y las y los victimarios suelen ser personas de referencia para la persona menor de edad. La continuidad en el tiempo de las acciones de violencia y la cercanía favorece que, dependiendo de la edad a la que comiencen, la víctima pueda llegar a normalizar la situación hasta el punto de confundirla con una forma habitual de relación.

Pese a que con frecuencia pueda pensarse lo contrario, a menudo no existe agresividad ni violencia física explícita, sino que se trata de una violencia que suele producirse a través de la seducción que la persona adulta abusadora ejerce sobre el o la menor de edad, buscando su aceptación y complicidad. En la etapa prepuberal, la víctima ni siquiera es consciente de estar siendo abusada, mientras que en la etapa de la adolescencia, ante posibles resistencias, los mecanismos de la seducción pueden llegar a combinarse con otras estrategias con diferente grado de agresividad como el sometimiento por la culpabilización, la amenaza o la agresión física. Es por ello que este tipo de violencia suele pasar desapercibida, cuando se descubre, su visibilización y su denuncia encuentran muchas reticencias, tanto por parte del entorno como por parte de la víctima. Aunque cada vez más casos de abuso sexual infantil salen a la luz, este tipo de violencia sigue suponiendo un tabú y quienes la sufren se siguen sintiendo estigmatizadas.

En relación con las consecuencias y el impacto de vivir una situación de abuso en la infancia, Save the Children, en un informe específico sobre este tema, advierte que “el abuso sexual a niñas, niños y adolescentes es un suceso traumático cuya vivencia se elabora desde la individualidad de la niña o el niño. Esto lleva a que tanto los síntomas que lo delatan como las consecuencias a corto y largo plazo puedan variar enormemente entre una víctima y otra.

A nivel judicial se da la situación de que en la mayoría de las ocasiones la víctima solo se atreve a denunciar pasados muchos años, cuando el delito ha prescrito. Con la Ley Orgánica 8/2021 de 4 de junio, de protección integral a la infancia y adolescencia frente a la violencia, va a cambiar el criterio de actuación, para alargar el tiempo de prescripción de estos delitos. Pero sin duda, la problemática fundamental en torno a los abusos sexuales infantiles, sobre la cual se sustentan las demás, es que sigue siendo una realidad muy silenciada. La mayoría de los abusos son intrafamiliares o del círculo cercano (88,5% según el estudio de la Fundación ANAR sobre la evolución de los abusos sexuales en la infancia en España entre 2008 y 2019) y se ocultan durante muchos años en una larga tradición de silencio y ocultamiento de los mismos, siendo cada vez más necesario que ocupen un lugar en la escena política y pública de nuestra sociedad.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), uno de cada cinco menores sufre abuso sexual antes de cumplir los 17 años. En Europa, EE.UU. y Canadá, un 20% de los niños y niñas han sido abusados sexualmente.

En Euskadi, se han elaborado diferentes documentos a fin de dimensionar el problema (a cuántas personas afecta o qué consecuencias tiene), evaluar la respuesta (recursos existentes) e identificar orientaciones para mejorar dicha respuesta. Así, el informe elaborado por el Observatorio de Infancia del Gobierno Vasco en 2019 sobre “Violencia hacia niños, niñas y adolescentes en la CAPV. Diagnóstico, retos y orientaciones”, realizado desde un enfoque multidimensional y participativo (34 entidades públicas y privadas) . En estos momentos se está finalizando la elaboración de la Estrategia Vasca contra la violencia hacia la infancia y la adolescencia a través de un proceso participado y contrastado con 25 entidades públicas, 9 entidades del Tercer Sector, así como con la participación de los consejos de participación de la infancia y la adolescencia de las tres capitales vascas y el consejo de participación infantil del Ararteko.

Y en el Parlamento Vasco está en funcionamiento dentro de la Comisión de Derechos Humanos, la ponencia para el abordaje de los abusos sexuales contra la infancia en Euskadi, con el objetivo de elaborar un estudio que permita identificar elementos para la prevención, detección precoz y protección de las víctimas, además de ofrecer garantías de no repetición y de reparación.

Ya con un solo caso, o con la sospecha de uno sólo, es primordial tratar este asunto en la agenda pública, como así se está haciendo.

Sabemos que las cifras de casos de abusos sexuales en la infancia son mucho mayores, es fundamental que los estudios se hagan desde una perspectiva integral desde una perspectiva de los derechos de la infancia y adolescencia con enfoque basado en derechos humanos, para así poder medir la magnitud de la problemática y actuar con la urgencia que requiere.

El abuso sexual infantil y adolescente presenta tantas dimensiones que requiere la intervención y coordinación de diferentes agentes y órganos de las diferentes administraciones, además de la implicación de todas las instituciones públicas o servicios con presencia de niños, niñas y adolescentes en los que puede tener lugar la detección y reparación de comportamientos de esta naturaleza.

  • El Ayuntamiento de Tolosa, junto a las instituciones competentes en las diferentes materias, considera imprescindible fomentar la detección y notificación para la mejora de la atención a los niños, niñas y adolescentes víctimas de abuso sexual. Para ello, elaborará e implantará protocolos para la detección y notificación precoz dirigidos a servicios y profesionales en contacto habitual con las y los menores y las familias

  • El Ayuntamiento de Tolosa, al igual que la Convención de los derechos del niño, reconoce a las personas menores de edad como sujetos titulares de derechos, además de como sujetos merecedores de la máxima protección. Es decir, un planteamiento de la atención y protección de niñas, niños y adolescentes basado en sus derechos requiere dejar de considerarles como víctimas “para adoptar un paradigma basado en el respeto y la promoción de su dignidad humana y su integridad física y psicológica como titular de derechos” según el COMITÉ DE LOS DERECHOS DEL NIÑO de la ONU. Observación general nº13. Derecho del niño a no ser objeto de ninguna forma de violencia (CRC/C/GC/13, de 18 de abril de 2011). Poner el interés superior de la criatura y adolescente en el centro de la intervención.

  • El Ayuntamiento de Tolosa junto a las instituciones competentes diseñará y llevará a cabo campañas de sensibilización social estables para informar, concienciar a la sociedad y fomentar la detección y notificación precoz para intervenir tempranamente sobre estas situaciones de violencia sexual. Campañas dirigidas especialmente a las personas (familias) de los entornos cercanos de las y los menores, ofreciendo herramientas para identificar los signos de violencia sexual. De este modo, todas estas personas podrán identificar este gravísimo problema social y dar la voz de alarma.

  • El Ayuntamiento de Tolosa desarrollará, en el marco de programas preventivos y de educación afectivo-sexual, actuaciones para el fomento de la detección y notificación de dicha violencia dirigidas a los propios niños, niñas y adolescentes, incluyendo el tema en las escuelas de padres y madres.

  • El Ayuntamiento de Tolosa promoverá que las familias tomen conciencia de las consecuencias que para niñas, niños y adolescentes puede tener la exposición prolongada a contenidos violentos en los medios de comunicación, videojuegos, Internet, etc.

  • El Ayuntamiento de Tolosa recalca la importancia de dar a conocer los recursos que actualmente hay, para que los que identifican estas situaciones y las víctimas que estén sufriendo abusos y maltrato puedan tener acceso a los recursos existentes y sentirse arropadas y acompañadas. Para ello, se tomará de base la estrategia vasca contra la violencia hacia la infancia y adolescencia elaborada y contrastada con 25 entidades públicas, 9 entidades del tercer sector y con los consejos de participación de infancia y adolescencia de las 3 capitales vascas y el consejo de participación infantil del Ararteko.

  • El Ayuntamiento de Tolosa solicita a todas las instituciones su implicación en función de su competencia para prevenir e identificar signos de violencia sexual infantil-juvenil, en todos los entornos en los que hay interactuación adultos-niños, para que se puedan tomar medidas que lo identifiquen cuanto antes y limitar los daños posteriores, desplegando un sistema que ofrezca formación y asesoramiento, que asegure que las y los profesionales que trabajan con niñas, niños y adolescentes en los diferentes ámbitos en los que se desarrolla su vida cuentan con las competencias adecuadas para identificar casos de violencia, y con el apoyo suficiente para resolver sus dudas.

  • El Ayuntamiento de Tolosa se coordinará con las instituciones competentes a fin de integrar este tema en los programas de estudio dentro del sistema educativo para que dispongan de herramientas para la detección del abuso infanto juvenil; así como en el ámbito médico, incidiendo especialmente en los y las profesionales que proporcionan acompañamiento y atención psicológica a los niños, niñas y adolescentes víctimas y sus familias, para su capacitación en protocolos y estrategias de intervención

  • El Ayuntamiento de Tolosa seguirá con atención el proyecto piloto de atención integral a menores víctimas de abusos sexuales que bajo el nombre de "Barnahus", llega a Euskadi con el liderazgo del Gobierno Vasco en colaboración con Save The Children, como primer paso para adaptarlo a la realidad vasca, aglutinando en un mismo espacio a todos los departamentos que intervienen en estos casos, tanto judiciales como sociosanitarios

  • El Ayuntamiento de Tolosa seguirá colaborando y coordinándose con la Diputacion Foral, Gobierno Vasco y el resto de instituciones competentes en la materia, además de con asociaciones dedicadas a la prevención del abuso sexual y el maltrato infantil, a fin de desarrollar las iniciativas y garantizar los recursos necesarios que permitan prevenir, detectar y brindar una atención adecuada y de calidad que asegure el acceso a los niños, niñas y adolescentes a sus derechos, poniendo en marcha todos los protocolos y las medidas de atención y protección efectivas

  • El Ayuntamiento de Tolosa reconoce y valora el esfuerzo y trabajo de todas las organizaciones y asociaciones e instituciones implicadas en erradicar este gravísimo problema, y hacen un llamamiento a apoyarlas.