Alubias y frío

Ayuntamiento de Tolosa
18/11/2019 | Comercio, Ferias y Turismo

Lluvias generalizadas acompañaron el sábado a los tolosarras y foráneos en un día gris, sombrío y difícil. La mesa repleta de viandas y la compañía de amigos y familiares fue lo que ayudó a sobrellevar las imposiciones. El calendario y la meteorología se aliaron en torno a esas mesas que citábamos repletas de alubias de Tolosa, de sacramentos y de postres exquisitos.

El mercado extraordinario de la alubia no pudo venir en mejor momento para hacer apetecibles, casi necesarios, los menús en torno a las mismas. Hubo el concurso de productores, hubo muchos invitados foráneos reunidos en los puestos de la plaza del Triángulo donde ofrecieron patés, conservas, charcutería especializada, postres de toda clase, bebidas y mucha calidez en una mañana tan desapacible.

Los productores de la plaza del Zerkausi se lucieron, una semana más, con una oferta de alubia en grano de calidad suprema. Intachable este año, mejor que en años pasados, muy llena, de grano grande y tersa. Los productores la mostraban en puntos de sequedad distintos, al gusto del consumidor, y, desde luego, todas ellas con un brillo y un tono entre negro y violáceo que mostraba a las claras su gran calidad. Buen año de alubia, de cosecha abundante y, sobre todo, de calidad récord.

Las verduras presentes junto a ellas lucieron en gran punto de frescor. Llamaron la atención las brasicáceas, entre las que destacaron las coles; algunas de casi 5 kilos de peso, y de muy buena calidad. Hubo, además, bastante verdura de hoja, como escarolas, espinacas y borrajas, afectadas en algunas huertas por las granizadas de días pasados. Coliflores, brócolis, coles de Bruselas o romanescus son otro de los fijos en las cestas de los consumidores en otoño, al igual que las calabazas. Lucieron, y mucho, las calabazas presentes en algunos puestos. Los tamaños eran espectaculares, algunas requirieron de los bancos de la plaza para soportar su peso. Todas ellas están en el mejor momento del año. Ideales para aportar los nutrientes necesarios para afrontar con garantías el invierno.

La oferta de miel es otro de los productos estrella en esta época del año. Miel de producción estrictamente local y ecológica en muchos casos, por supuesto, sin aditivos de ningún tipo, frente a las de origen más “industrial”. Una miel de garantía a la hora de lidiar con catarros, resfriados y dolores de garganta. Supone otro de los regalos que hace el mercado semanalmente.

Setas como el hongo del país, el níscalo de origen local, o la ziza hori también fueron otro de los regalos en la feria del sábado. Brillaban para los amantes de las setas los kilos de culetros que hubo en la mesa de Lasa. Tentaciones difíciles de evitar.