Caprichos gastronómicos en un mercado festivo

El traslado de ubicación del mercado suele tener consecuencias muy dispares dependiendo sobre todo de la meteorología y de la fiesta o fiestas que se celebren y que acarrean dicho cambio de ubicación. En el caso de ayer, no llovió por la mañana (claro punto a favor), y se celebró el ya consolidado fin de semana del besugo. Iniciativa de la sociedad Txinparta y apoyados desde un inicio por el ayuntamiento, consiguen año tras año citar a los más reconocidos parrilleros de Orio, especialistas todos en este pescado, y preparan un menú digno del mejor de los asadores de la costa. Para muchos, sirve como antesala del verano en la villa Tolosarra, y desde luego congrega a muchos locales y foráneos frente a las brasas en el Zerkausi.

Muchos de ellos, si no todos, aprovecharon la mañana para abastecer sus despensas con los “regalos” que había preparados en las mesas del mercado. Las cerezas locales presentes en un par de mesas son un buen ejemplo. Un producto refinado, de sabor auténtico, del que se recuerda en lo más profundo de la conciencia en cuanto se prueba uno de los frutos y las papilas se activan, y aun precio contenido por si fuera poco. El que suscribe las recomienda.

Las zizas de primavera que vimos en bastantes puestos eran de las que se recuerdan. Los aromas, a bosque, a suelo, permiten viajar a lugares primigéneos; no ya solo cuando las comemos, sino desde que las compramos y las cocinamos ya las estamos disfrutando. Combinarlas con los guisantes presentes en muchas de las mesas supone una cota gastronómica difícil de superar, por sencillez como por claridad de la propuesta, y son muchos los que se dan el capricho estos días ya que los precios no son en absoluto prohibitivos. De las propias de esta época cabe destacar la excelente presencia de los primeros tomates de invernadero que ya vemos en varias mesas, o la inminente llegada de las primeras vainas del país, también de invernadero

Destacar así mismo la avasalladora presencia de la oferta de flores y plantas de la plaza Berdura. Lobelia, geranio, geranio hiedra, alegría de guinea, coleo, dipladenia, verbena, hortensia, begonia dragón o pendiente de la reina eran algunas de las especies de sugerente nombre y mejor aspecto que hubo a la venta. La colección de aromáticas merece mención aparte. Lavandas, mentas, oréganos, tomillos, romeros o hierbabuenas entre otras aportaban olores poco habituales en nuestros montes y cada vez más habituales en nuestros balcones.

Los puestos de planta hortícola ofrecen desde hace tiempo las especies que se van a plantar y cultivar en verano y otoño. Son muchos los cultivadores que esperan una ventana de ausencia de lluvias de por lo menos tres días, para permitir drenar a los suelos y permitir el laboreo. En cuanto llegue, el movimiento y la actividad de estas mesas será enorme.

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