Lluvias y subida del mercurio

Ayuntamiento de Tolosa
07/01/2020 | Comercio, Ferias y Turismo

La leve lluvia del sábado marcó el ritmo del mercado semanal, en una jornada de mucha contención en las compras. Parece que los días de excesos y de compras navideñas han tocado las carteras de los compradores y, desde luego, se ha notado que han tratado de ahorrar en sus cestas. La oferta, aunque adaptada en cantidades a las previsiones a la baja, no ha sido escasa ni en variedad ni en calidad del producto.

Hubo mucha verdura de gran calidad, que mejorará, sin duda, gracias a la templanza de temperaturas y al aporte hídrico que ha venido con las lluvias del fin de semana; ha habido especies propias del invierno que suponen sorpresas. Hablamos de las distintas berzas y coliflores presentes en casi todas las mesas, y que ofrecen la alternativa de las coliflores moradas o de las coles de romanescu como punto más exótico. Hay, y ya desde hace bastantes semanas, alternativas menos conocidas a hortalizas de toda la vida como la patata, la col o las acelgas. Hablamos de las txaiotas, muy utilizadas en Latinoamérica y muy valoradas por sectores habituales de procedencia foránea, así como los crones o las patatas negras, que son hermanas de la patata tradicional. El pak choi, el kale o el tak choi son esas verduras de hoja de gran aceptación en círculos alternativos y que aportan un complemento a las brassicáceas que antes citábamos. Seguro que con el paso de los años serán especies profundamente arraigadas en el mercado semanal.

Destacó también, el sábado, la buena oferta de fruta con la manzana a la cabeza, en distintas variedades y calidades. Hubo además bastante pera del país en muy buen punto de consumo, así como kakis que se encuentran ya maduros y listos para el consumo. Hubo también nísperos, que gozaron del aprecio de sus incondicionales, y excelentes kiwis del país, que poco a poco se van viendo en puntos de madurez más elevados. Otro de los elegidos entre los favoritos de muchos.

De la lista de micológicas locales hay que citar en exclusiva la gamuza, que va poco a poco consolidándose entre los aficionados. Los que buscaban una alternativa en forma de boletus optaron por el puesto de Lasa. En él vimos hongo de muy buena calidad, angula de monte, algo de níscalo y unas aromáticas trufas negras que hicieron las delicias de los cocinillas más aplicados.

La oferta de queso del país sorprenderá en pocos días con el queso nuevo de Idiazabal, gracias a la temprana puesta en producción de la cabaña ovina en algunas zonas de nuestra comarca. Permitirá disfrutar de un producto tan excelente casi dos meses antes de lo que suele ser habitual en otros años, y, desde luego, gozará del aprecio de la mayoría de los compradores. Aún habrá quien siga preguntando por los quesos más fuertes y curados, seña de identidad, por otro lado, de los excelentes quesos locales que disfrutamos.