El Ayuntamiento tiene por objetivo convertir el parque Elosegi en una zona de promoción de la biodiversidad urbana, dando prioridad a sus posibilidades para la educación e investigación medioambiental. Siguiendo esa línea, en los últimos años se han impulsado diferentes actividades en el mismo, entre las cuales está la sesión de anillado científico llevada a cabo en mayo de 2017 con la colaboración del área de Ornitología de Aranzadi.
Ambas instituciones han dado continuación a la colaboración con la instalación en el mismo parque de un observatorio y un comedero para aves. Con el fin de dar a conocer estos dos nuevos elementos, para este pasado domingo, 3 de junio, se organizó un taller de observación e identificación de aves, en dos turnos, a las 10:30 y a las 12:00 horas. Los expertos ornitólogos de Aranzadi dieron algunas explicaciones sobre las aves y un paseo por el parque Elosegi, para conocer el mismo y las aves que se encuentran en él.
Galería de imágenes al final.
Últimas obras de reforma en el parque Elósegi antes de su apertura
Elosegi era un parque privado del siglo XIX, posteriormente adquirido y convertido en público por el Ayuntamiento. Fue creado según el modelo de la escuela del famoso paisajista francés Pierre Ducasse. Esta zona natural de 26.720 m2 de superficie conserva elementos interesantes de la época: cuevas artificiales, un estanque, manantiales, una torre de observación, etc. Todavía se mantienen distintas especies plantadas en esa época.
El parque tiene mucha pendiente, el 6% por término medio, y se encuentra en una zona de transición entre la villa y el monte, lo que define totalmente la naturaleza del mismo: cumple la función de un bosque natural dentro del pueblo, es el pulmón de la villa y una zona importante de promoción de la biodiversidad urbana.
La rehabilitación del parque se ha llevado a cabo en varias fases. En la actualidad el Ayuntamiento está ejecutando las últimas obras para poder abrirlo este mismo año, la rehabilitación de la torre-observatorio y el acabado del cercado, principalmente. Para ello se ha reservado 100.000 euros en los presupuestos de 2018.
El concejal ha avanzado que las obras de rehabilitación de la torre comenzarán “en el verano”: “nuestro objetivo es reforzar el potencial que tiene como observatorio”, por lo que se mantendrá su actual diseño octogonal. La primera planta se conservará en su aspecto actual, renovándola, y el observatorio se construirá encima y se cubrirá con una pérgola de acero, manteniendo la forma octogonal de la primera planta. Se instalarán asientos bajo la pérgola. Esta segunda planta contará con una barandilla en todo su perímetro.
Además se terminará el cercado del bosque, y posteriormente se abrirá al público.
Pasear y observar el patrimonio natural
Las actividades prioritarias son los paseos y la observación de la naturaleza y el patrimonio. El parque ofrecerá la posibilidad de pasear tranquilamente y “desconectar” el mismo Tolosa, “perdidos” en el bosque.
Además, abre nuevas posibilidades para la educación e investigación medioambiental, ya que cuenta con abundante flora y especies de árboles. Y también es un lugar apropiado para observar la fauna, al ser refugio de pájaros, aves y murciélagos. También ofrece posibilidades en el campo de la geología, sobre todo para observar ejemplos de sistemas kársticos, como lapiaces, manantiales, cuevas... Patxi Amantegi informa que están preparando el proyecto de 'bosque escuela' con la colaboración de los centros escolares del municipio y de Ekogune: “hemos tratado diferentes ámbitos de modo experimental, realizando para ello diferentes adaptaciones en el parque. Los resultados los daremos a conocer en breve, una vez finalizado el curso escolar. El objeto es crear unidades didácticas para la educación ambiental”. Por ejemplo, todos los años, en torno al día del árbol, grupos de alumnos de los centros de Tolosa hacen una plantación de árboles en el mismo, guiados por el TIZ, Centro Medioambiental de Tolosa.
Como se ha mencionado, el primer taller de anillado, realizado el año pasado con la colaboración de Aranzadi, tuvo lugar en el parque, convirtiéndolo en lugar de encuentro de aficionados a las aves y ornitólogos.