- Han participado 7 centros: Samaniego, Orixe, Tolosaldea Lanbide Heziketa Institutua, Laskorain, Herrikide, Inmakulada ikastetxea y el centro Peñascal. En total, han participado 4.700 escolares.
- Los escolares han propuesto al Ayuntamiento diversas iniciativas y han adoptado también varios compromisos para mejorar el estado del suelo.
Han transcurrido 17 años desde que se puso en marcha, en Tolosa, la Agenda 21 Escolar. En concreto, dio sus primeros pasos en el 2003, y, de la mano de TIZ (Centro medioambiental de Tolosa), ha conseguido acercar a los centros escolares los compromisos para un desarrollo sostenible. Este programa educativo ofrece la posibilidad de desarrollar la perspectiva local y ayudar a que la comunidad educativa participe en el modo de vida del municipio.
Así, este año han participado 7 centros: Samaniego, Orixe, Tolosaldea Lanbide Heziketa Institutua, Laskorain, Herrikide, Inmakulada ikastetxea y el centro Peñascal. En total, han participado 4.700 escolares, de distintos niveles y edades, desde la educación infantil hasta el bachiller y formación profesional.
Todos los años se elige un tema relacionado con el medioambiente. Por ejemplo se han tratado temas como la movilidad, la energía, la falta de equidad, los residuos, la alimentación, el agua, el cambio climático o la biodiversidad. Este año han trabajado en torno al suelo, y los escolares han contado con la implicación y colaboración del profesorado, del resto de la plantilla de los centros, de los equipos técnicos de diversos departamentos municipales, de los padres y madres y de la ciudadanía.
Han desarrollado diversas actividades para ir acercándose al tema y trabajarlo. En primer lugar, cada alumnado ha analizado la situación de su centro, y partiendo de las conclusiones derivadas de ese análisis, han definido los planes de acción de los centros. Posteriormente, han realizado diversos estudios de campo, de calle, para estudiar la situación del municipio. Por último, han realizado una asamblea entre los centros, para recapitular y acordar los compromisos de los centros y los compromisos a presentar al Ayuntamiento, en relación con el suelo.
Para la presentación de estas propuestas se ha llevado a cabo el Foro Municipal de la Agenda 21 Escolar: se han reunido lo/las representantes del alumnado de los centros con la representación municipal para acordar los pasos que se deben dar y las medidas que se deben adoptar para lograr una Tolosa más sostenible. Han participado el concejal de Medioambiente, Patxi Amantegi, y el técnico de Medioambiente, Iñigo Muñoz.
Han realizado las siguientes propuestas: disponer más zonas verdes y construir menos casas; acondicionar espacios para huertas; conceder subvenciones y premios a las empresas que cuidan el suelo; mantener el mercado sabatino; mejorar los bidegorris y ampliar la red; y facilitar el alquiler de las viviendas que están vacías. Han destacado la necesidad de instalar contenedores en las zonas peatonales de la ribera del río para la clasificación de residuos, impulsar sesiones de sensibilización dirigidas a la ciudadanía para una mayor observación y conocimiento del tema, y la organización de auzolan o trabajo vecinal para la conservación de los entornos naturales.
Patxi Amantegi ha manifestado que algunas de esas acciones ya se están implementando, por ejemplo, la limpieza de las riberas, auzolandegi… pero que asumirán algunas de la propuestas para ir complementándolas. “En el caso de los bidegorris, el Ayuntamiento está elaborando un nuevo Plan de Movilidad y se estudiará la propuesta realizada. En cuanto a las viviendas vacías, el Ayuntamiento tramita ayudas para poner en alquiler las viviendas que están vacías”. El teniente de alcalde ha respondido una a una, con todo detalle, todas las propuestas: “vuestras sugerencias quedan recogidas y seguiremos en contacto para tener en cuenta vuestra opinión en el camino de la movilidad sostenible”.
Los escolares también se han comprometido a cuidar las plantas, prados y árboles; a no echar basura; a generar menos residuos con la reducción del uso del plástico; a la clasificación adecuada de los residuos; al consumo de alimentos naturales en vez de procesados; y a la recuperación y uso de zonas verdes que actualmente no utilizan en los centros.